lamentamos con profunda pena el artero asesinato de nuestro compañero Marcos Hernández Bautista, corresponsal del periódico Noticias de Oaxaca en Jamiltepec, y nos sumamos a la exigencia de que el hecho sea esclarecido con presteza y eficacia para que el, o los responsables sean juzgados y sancionados con todo el rigor de la ley.
Quienes formamos parte de Periodistas, Editores y Redactores de la Costa de Oaxaca (Percosta), lamentamos con profunda pena el artero asesinato de nuestro compañero Marcos Hernández Bautista, corresponsal del periódico Noticias de Oaxaca en Jamiltepec, y nos sumamos a la exigencia de que el hecho sea esclarecido con presteza y eficacia para que el, o los responsables sean juzgados y sancionados con todo el rigor de la ley.
Como compañeros del gremio, consideramos que hoy, más que nunca, nos encontramos en una situación de alta vulnerabilidad para ejercer el oficio periodístico, pues nos enfrentamos a un escenario en el que se encuentran cada vez más acotados los derechos a la libre expresión e información.
Nos preocupa de manera particular que ante la falta de eficacia por parte de las instancias que deberían cumplir con la firme labor de procurar justicia, y dados los casos de agresiones y asesinatos de otros compañeros en la entidad que no han sido resueltos satisfactoriamente; ello nos coloque en un estado de indefensión en el que cada vez es más evidente el ominoso mensaje de que si alguien atenta contra un reportero; si alguien desea hacer a un lado a un comunicador incómodo, lo puede hacer sin que ello sea castigado, porque al final, la que reina en Oaxaca y en todo México es la impunidad.
El caso de nuestro compañero Marcos Hernández, quien además de ser corresponsal y reportero en varios medios de comunicación, se desempeñaba actualmente como regidor de Cultura en el ayuntamiento de Jamiltepec, no hace más que demostrar que para quienes ejercemos la labor informativa, el riesgo se ha convertido en un elemento con el que debemos lidiar constantemente, y más cuando nos desempeñamos en regiones y municipios donde cualquier cacique, funcionario, pseudo líder social y delincuentes de cuello blanco o de cualquier color se sienten intocables y tienen la piel muy sensible ante cualquier tipo de crítica.
En las regiones, el reportero está a la mano, cualquiera sabe dónde vive, quién es su familia y por qué lugares transita. Desde el ratero de poca monta, hasta el funcionario de más alto nivel puede llegar fácilmente hasta quien lo ha evidenciado públicamente, y lastimar sus bienes o integridad, o como suele suceder, mandar personeros para que hagan el trabajo sucio contra quien osó retarlo por medio de un artículo periodístico.
Por estas razones, y por la urgente necesidad de mostrar nuestra indignación, rabia y hacer de ellas una exigencia que se traduzca en la aplicación de justicia sin concesiones, nos pronunciamos por el inmediato esclarecimiento del crimen de Marcos Hernández.
Exigimos por tanto, a la Fiscalía General del estado que realice la investigación correspondiente sin fabricar culpables ni crear inverosímiles líneas de investigación que desvíen el móvil real del asesinato.
Asimismo, nos solidarizamos con la familia de nuestro compañero y hacemos votos para que pronto encuentren consuelo a su dolor.
ATTE: INTEGRANTES DE PERCOSTA
Patricia Pacheco Guzmán
Guadalupe Pérez González
Antonio García Pérez
Roberto Emilio Agustiniano Domínguez
Raúl Laguna Cabrera
Deyanira Aquino Campos
Tito García Pérez
Osbaldo Abel Ramírez
José Torrentera Olivera
Yván Luna
Emanuel Galguera Romero
Fernando Casteleyro
