Al abrir los actos litúrgicos con motivo de la Pascua de Jesucristo, el Arzobispo de Antequera, José Luis Chávez Botello, lamentó que la Semana Santa en Oaxaca, se celebre en medio de la violencia, anarquía, impunidad, inseguridad e injusticia.
Por: Jaime GUERRERO/@JaimeGuerrero08
Oaxaca, México; 14 de abril, 2014.– Al abrir los actos litúrgicos con motivo de la Pascua de Jesucristo, el Arzobispo de Antequera, José Luis Chávez Botello, lamentó que la Semana Santa en Oaxaca, se celebre en medio de la violencia, anarquía, impunidad, inseguridad e injusticia.
En su tradicional conferencia de prensa, tras culminar la misa dominical en la Catedral Metropolitana, pidió a los que han cometido la serie de ejecuciones y asesinatos: “si son católicos que revisen si creen en dios, porque no se puede ser católico y dañar a terceros. Porque no se puede ser católicos y matar”.
A quienes no son católicos, llamó a revisar a quien beneficia los asesinatos, porque a la larga pierden paz e irán sembrando desconfianza “y tarde temprano andarán huyendo”.
Chávez Botello, dijo que no se puede ser feliz adoptando el mal.
En el inicio de Pascua de Jesucristo, ministerio central de la Semana Santa, criticó que como en aquellos tiempos de la vida creador, hoy cuántos exigen como los judíos, la libertad Barrabas. “Muchos exigen libertinaje. La libertad tendiéndolo como hacer cada quien lo que quiera. Ese era Barrabas. Algunos se corrompen y hacen fraudes. Así se quiere dejar existir la libertad de Barrabas”, asestó-
Reprobó entonces a los modernos fariseos que, como hace más de dos mil años, piden soltar a Barrabás, hoy, representado en la corrupción, el pacto con el crimen, el aborto, matrimonios gay y la división de la sociedad.
“La celebración de la Pascua se abre con el Domingo de Ramos poniéndonos frente a Jesús y a Barrabás; Barrabás es símbolo del mal, de la corrupción y del crimen.
Como en tiempos de Pilato, hoy no pocas personas están gritando en Oaxaca: suéltanos a Barrabás”, señaló
Añadió que pedir la liberación de Barrabás es aferrarse a tapar la corrupción, querer desalentar y dividir a la sociedad, distorsionar el matrimonio, dañar la vida con máscara de defender supuestos derechos y pactar con el crimen.
Sin llamar por su nombre al gobierno y partidos coaligados, dijo que la verdad no es cuestión de acuerdos, la unidad no es simplemente alianzas de beneficios.
Llamó en tanto a quienes están probando la vida fácil, a quienes están probando y en la tentación de aliarse con el mal y el crimen los convocó a ver el destino de quienes optaron por este camino.
“Decidamos por el bien, aunque no nos toque ver a un Oaxaca prospero pero sembremos”, alentó.
Puso como ejemplo a generaciones pasadas que con pala y pico no vieron caminos pavimentado, sembraron con honestidad, pero dejaron el valor de la honradez y paz.
“Siempre un crimen que quitan a la vida, se tiene castigar y aplicar la ley, pero todos nos tenemos que revisar cuántos somos ladrones, hacen “chanchullo”, engañan a la sociedad, cuántos somos violentos”, reflexionó.
Chávez Botello, indicó que el quitar la vida de una persona, es un llamado fuerte a la reflexión.
Bajo esa perspectiva, llamó a los sacerdotes, a quienes tienen un responsabilidad social, profesionistas, políticos en Oaxaca a vivir la Pascua en Paz, adentrándose en el sentido autentico y original la celebración.
En tanto, frente a las críticas de que fue objeto en redes sociales, por encabezar la peregrinación del Domingo de Ramos, apoyado de una persona que le cubría de la inclemencia del Sol con una sombrilla, dijo que optó por esa sombra por sus severos padecimientos en la piel.
El día de las Palmas
Cientos de palmas tejidas en cáliz, virgen, crucifijo o resplandor, engalanaron el Domingo de Ramos, acto que simboliza la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén y que marca el inicio de la Semana Santa.
Como cada año, el Arzobispo de Antequera, José Luis Chávez Botello, bendijo las palmas en la Iglesia de la Compañía; antes emprendió la peregrinación de la Iglesia de Santo Domingo hacia la catedral metropolitana.
Ahí, el arzobispo los convocó a reflexionar y vivir el ministerio de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, así como cada uno de los actos que forman parte de esta fiesta religiosa:
El lavatorio de pies, la distribución del pan bendito, la visita de los siete templos, la adoración a Jesús Sacramentado, el Viacrucis, la procesión del silencio, el pésame a la Virgen, el sábado Santo y la vigilia Pascual con la celebración de la resurrección que se prolonga 50 días y cierra en Pentecostés.
