// ENTRE LÍNEAS: Ismael Sánchez Zamora - Panorama del Pacifico
panoramadelpacifico@gmail.com                          

Llamada la pelea del siglo, el show que observé el pasado sábado por la noche ratificó lo que pronosticaba.pelea-del-siglo

Resumido en que en breve se anunciara la revancha del siglo, haciendo gala de la globalización en la que vivimos, todo es negocio a costa de las masas, como en los tiempos del imperio romano, la aplicación central para tener el poder controlado es tener al pueblo entretenido.

Qué mejor manera para llevar a cabo este proyecto que darle pan y circo, método eficaz para desviar la atención de los hechos que suceden a nuestro alrededor, sucesos vitales en la transformación en que nos encontramos, el mundo atraviesa por momentos cruciales y de los cuales depende el futuro incierto de nuestro planeta.

Los desastres naturales sumados a los que originan quienes gobiernan las masas se hacen presentes en cada instante de la humanidad, desde tiempos remotos hasta la actualidad, decadencia, denigración, pérdida de valores y espiritualidad son símbolos crecientes del homo sapiens.

La materialización del ser se acrecienta, la materia remplaza la conciencia humana transformándola en el molde deseado por los poderes que rigen los destinos de este planeta y quienes lo habitan, miles de millones controlados por un puñado de individuos degenerados que solo persiguen la obtención de más y más poder cueste lo que cueste sin importarles absolutamente nada la vida ajena, su único fin es el dominio total de lo existente. Mientras los sucesos que se desarrollan a nivel mundial pintan cada más tenebrosos aquí en nuestro territorio nacional se ensombrecen rápidamente, internamente la podredumbre de nuestra clase política se muestra incorregible, asociada a los poderes fácticos se encuentra adueñándose de todo lo que queda y vendiéndolo al mejor postor.

rdssocialsTiempos difíciles que obligan a la adaptación del mismo, la tecnología en constante desarrollo, la conectividad agrandándose y llegando a más rincones inaccesibles, ahora con las redes sociales la sociedad cuenta con un importante y fundamental espacio para el intercambio de ideas y sentimientos generalizados en el andar de la vida, su aprovechamiento se descubre en el andar cotidiano, usado para un sinfín de causas y motivos por los usuarios de la red, la manifestación y muestra del reflejo que se observa es claro termómetro reflectado de los participantes, el control no existe, cada quién expresa el sentir que desean comunicar a terceros, algunos aprovechan para anónimamente exponer negatividad a la positividad.

La red irresponsablemente es usada como un cuadrilátero para golpear al rival hasta con la cubeta, aprovechando la carencia de un réferi que señale las faltas cometidas en el reglamento que rige el combate, la cultura del GATOPARDISMO arraigada en lo más profundo de nuestra sociedad, cuya semilla plantada a raíz de nuestra independencia por los gobiernos en turno continúa cosechando frutos hasta la actualidad, los caminos libres se van obstaculizando, lo poco que nos queda de valores cívicos y espirituales se van corrompiendo, los poderosos haciéndose de más poder, los jodidos más jodidos, el último eslabón de salvación con el que todavía contamos y que es la manifestación de la libre expresión y que pocos ejercen con responsabilidad y profesionalismo está siendo coartada.

carmen-aristeguiLa muestra más clara actualmente se dio con Carmen Aristegui, sorteado este caso por el poder en turno acallando una voz poderosa que le resultaba incomoda y negativa para el desarrollo de sus malévolos planes silenciosos, ahora su siguiente objetivo apunta al semanario PROCESO, silenciar conocimiento y darlo a conocer, objetivo fundamental del gobierno actual, al costo que sea la batalla emprendida ha iniciado, o actuamos de inmediato no solo solidarizándonos con quienes son las presas a exterminar, sino demostrando con hechos nuestro rechazo a la guerra emprendida por el poder en contra de quienes combaten por la libertad de expresión o continuamos quejándonos observando el acontecer cotidiano y el cual va en el camino del deterioro y descomposición del tejido social y lo que estamos dejándole a nuestros descendientes. AQUÍ HUATULCO.

print