lideres mundiales en la fe en la ceremonia del Vaticano
Amma se unió a Francisco en el Vaticano y otros 10 líderes religiosos del mundo esta mañana, en una ceremonia de firma de una declaración en contra de la trata de personas y la esclavitud.
amritapuri.org
02 de diciembre 2014 – Ciudad del Vaticano, Roma
Amma se unió a Francisco en el Vaticano y otros 10 líderes religiosos del mundo esta mañana, en una ceremonia de firma de una declaración en contra de la trata de personas y la esclavitud.
Los otros líderes eran: Justin Welby, el arzobispo de Canterbury y jefe de la Iglesia Anglicana, budista: el maestro zen Thich Nhat Hanh (Thay) (representado por el venerable Thich Bhikkhuni Nu Chan Khong); Mohamed Ahmed El-Tayeb, gran imán de Al-Azhar (representado por el Dr. Abbas Abdalla Abbas Soliman, el subsecretario de Estado de Al Azhar Alsharif); Gran Ayatola Mohammad Taqi al-Modarresi; Gran Ayatolá Sheikh Bashir Hussain al Najafi (representado por el jeque Naziyah Razzaq Jaafar, asesor especial del gran ayatolá); Musulmán: Sheikh Omar Abboud; Malasia monje budista: Ven. Datuk Kirinde Dhammaratana Nayak Maha Thero, y el gran rabino David Rosen, KSG, CBE, su Santidad el Patriarca Ecuménico Bartolomé (representados por Su Eminencia el Metropolita Emmanuel de Francia), el rabino Skorka, el coordinador de la comunidad judía en América del Sur.
La firma hoy de Declaración Universal contra la Esclavitud los líderes de la fe ‘es una iniciativa histórica, trabajando juntos para poner fin a una tragedia mundial en 2020, reuniendo congregaciones representadas combinados de seguidores y simpatizantes de más de la mitad de la población mundial.
Amma comentó a sí misma:
“Nos sentimos honrados y agradecidos de que Su Santidad el Papa Francisco nos ha reunido aquí hoy bajo los auspicios de la Red de Libertad Global. Me siento optimista de que todas las religiones mundiales se unen entre sí para inspirar a ambas acciones espirituales y prácticos hacia la sociedad que termina el horror de la esclavitud y la trata de personas.
“La gente de todas las naciones y religiones se convierten en víctimas a los efectos devastadores de la esclavitud humana y la experiencia abuso extremo y sufrimiento. Su dolor físico y mental no diferencia entre lengua, raza o color de piel. Estas víctimas son sólo un único grupo de humanos, luchando contra las garras de la tristeza sin fin y la supresión emocional.
“La mente humana ha creado muchas divisiones en nombre de la religión, la casta, el lenguaje y las fronteras nacionales. Vamos a tratar de crear un puente de lo abarca todo el amor puro de romper estas paredes de creación propia “.
Francisco comentó: “Inspirado por nuestra fe, nos hemos reunido hoy a causa de una iniciativa histórica y una acción concreta: declarar que vamos a trabajar juntos para erradicar el terrible flagelo de la esclavitud moderna en todas sus formas. La explotación física, económica, sexual y psicológica de los hombres, mujeres, niños y niñas se vincula actualmente a millones de personas a la deshumanización y la humillación. Cada ser humano -hombre, mujer, niño y niña- es una imagen de Dios. Dios es amor y la libertad que se da libremente en las relaciones interpersonales; por lo tanto, cada ser humano es un individuo libre, cuya vida es para el bien de los demás, vivir en igualdad y fraternidad “.
Arzobispo Justin Welby, comentó: “Los cristianos creen que la vida divina se vivió plenamente y de forma única en la carne y la sangre de un ser humano, Jesucristo, nacido a través de la cooperación voluntaria de su madre María. Y así estamos obligados a ver a cada ser humano como parte del plan divino. Esto significa que ningún cuerpo humano puede, en ninguna circunstancia, ser simplemente un objeto para ser objeto de comercio, trata o esclavizada “.
Rabino Dr. Abraham Skorka, rector de la MT Meyer Latinoamericana Seminario Rabínico, y el rabino de la Comunidad Benei Tikva, dijo: “La heroica saliendo de la esclavitud de Egipto es una de las partes esenciales del Pentateuco, y uno de sus mensajes centrales es que el valor y profundo significado inherente a ser una persona libre. Se desprende de lo anterior que, en la concepción bíblica, esclavizando a un individuo perjudica a la imagen de Dios que miente dentro de cada humanidad y sólo las personas que pueden ser completamente y profundamente libre puede dignificar la condición humana para sí mismos y en los ojos de Dios “.
La mayoría Ven. Datuk K. Sri Dhammaratana, el Jefe Sumo Sacerdote de Malasia, dijo, “la trata de personas y la esclavitud es tan generalizada que se practica en todas las partes del mundo a diferentes niveles de intensidad. Los líderes religiosos tienen un papel importante trabajar junto con los partidos del gobierno de poner fin a estas actividades negativas. Creo que juntos debemos estar unidos con el fin de aumentar las investigaciones y enjuiciamientos de delitos de tráfico de mano de obra y la esclavitud. Debemos asegurarnos de que hay derechos humanos iguales para todos y que todos puedan vivir la vida que se merecen “.
Mohamed Ahmed El-Tayeb, Gran Imama de Al-Azhar (presentado por el Dr. Abbas Soliman, el diputado de Al-Azhar), dijo: “En ningún momento el Islam tolera la esclavitud entre la gente que lo hace por ser del mismo padre, Adam y la misma madre, Eva. Todas las formas de esclavitud se consideran reprobable en la ley islámica y los derechos humanos y religiosos instituciones, autoridades y organizaciones deben trabajar para abolir ellos y empujar a los países a promulgar leyes y legislaciones que impiden la privación de las libertades “.
Su Santidad el Patriarca Ecuménico Bartolomé, el líder de la Iglesia Ortodoxa, dijo: “Nos gustaría asegurarle que estamos con ustedes en la solidaridad y el compromiso de erradicar las expresiones modernas de esclavitud, que son una vergüenza para Dios, una deshonra para la humanidad, y una degradación de todas sus víctimas inocentes en las imágenes y semejanza de nuestro Creador celestial. “
Y Justin Welby, el arzobispo de Canterbury, dijo: “Los cristianos creen que la vida divina se vivió plenamente y de forma única en la carne y la sangre de un ser humano, Jesucristo, nacido a través de la cooperación voluntaria de su madre María. Y así estamos obligados a ver a cada ser humano como parte del plan divino. Esto significa que ningún cuerpo humano puede, en ninguna circunstancia, ser simplemente un objeto para ser objeto de comercio, trata o esclavizada “.
