150 personas provenientes de la comunidad de San Felipe Lachilló perteneciente al municipio de Santiago Xanica habían cerrado el paso a conductores que circulan por esa importante vía de comunicación terrestre.
Guillermo BEJARANO
Santa Cruz Huatulco, Oax.- 8:50 de la mañana, la Delegación Regional de la Policía Federal aseguraba que no había bloqueo carretero, cinco minutos después la información derivada del gobierno federal confirmaba que a la altura de la comunidad Piedra de Moros en la carretera federal número 200, tramo Santa Cruz Huatulco- Aeropuerto Internacional al menos 150 personas provenientes de la comunidad de San Felipe Lachilló perteneciente al municipio de Santiago Xanica habían cerrado el paso a conductores que circulan por esa importante vía de comunicación terrestre.
Por las redes sociales, a través de mensajes y por llamadas telefónicas, comenzaron alertar a los integrantes del Comité por la Defensa de Huatulco (CODEHU), quienes al conocer la información empezaron a llegar a ese punto carretero. Media hora después del cierre carretero, los bloqueadores fueron replegados para que dieran paso a los vehículos en un solo carril que va de Santa Cruz hacia San Pedro Pochutla.
Para ese entonces ya estaba presente Antonio Villalobos, Jefe Operativo de la Policía Vial; elementos de la Policía Estatal, y la Policía Federal, El Director de la Policía Municipal y sus 130 elementos brillaban por su ausencia, no luchaban por defender la soberanía de Huatulco, como lo hacía el Licenciado Alejandro Peña Díaz cuando fue director la corporación o como lo hacía el Teniente retirado de la Marina Jorge Lavariega cuando fue Director de Seguridad Pública de Huatulco, no llegaron los marinos. Para detener a pescadores tiburoneros para eso son buenos, pero para hacer acto de presencia y actuar en el bloqueo nada más no, es carretera federal por lo tanto les incumbe accionar.
Por momentos los ánimos se calentaban pero solo quedaba en intercambio de palabras. Muy activos en el bloqueo observamos a Marco Tulio Solís a Ramón Sinobas, Delegado Regional del Fondo Nacional de Turismo; Gustavo Ficachi, Presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Huatulco; el empresario Jordi Masdefiol y los constructores conocidos como “Los Pollos”.
Por ahí también estuvo presente el Presidente de la Canaco, Serafín Juan Juan; personal de hoteles de la zona de Tangolunda, personal de empresas constituidas aquí en Santa Cruz Huatulco. La exigencia de la gente de San Felipe Lachilló es que el presidente de su pueblo no le da su participación y acusan que se está robando el dinero. Ante estos argumentos los ciudadanos de Huatulco señalaban que si no les da recursos que le tomen o le quemen el palacio municipal, que bloqueen todos los accesos y salidas de ese pueblo, pero no que no vengan a bloquear la carretera federal.
De acuerdo a la información obtenida por este reportero, fueron al menos dos vuelos que fueron cancelados, cuando las unidades turísticas circulaban por el lugar, los turistas y vacacionistas con sus teléfonos celulares tomaban imágenes del bloqueo, para ese entonces ya había fricciones entre los que bloqueaban y los ciudadanos de Huatulco, el calor era intenso, la falta de acuerdo empezaba a permear en el ánimo de ambos bandos.
De momento se escuchó una orden que salió de uno de los líderes de Lachilló: “vayan atrás, les llegamos por atrás” insistía refiriéndose que personas con palos tomaran el otro frente de batalla y con eso los integrantes de CODEHU quedarían encapsulados, así era más fácil agredirlos, ellos traían palos largos y los de CODEHU algunos traían toletes. Fue ahí cuando se dio el enfrentamiento, los empleados de conocido hotel de la zona de Tangolunda se plantaron enfrente de los bloqueadores y empezó el intercambio de golpes y piedras. Derivado de ese enfrentamiento que duró alrededor de cinco minutos, salió lesionado un empleado del hotel Dreams, le fracturaron la mano, le desviaron el tabique nasal, otro recibió una pedrada a la altura de la sien.
12:15, al mediodía comenzaron a llegar más lancheros, prestadores de servicios, al que no vimos fue al presidente de la Canirac, Ricardo Pacheco, tampoco a otros personajes conocidos de aquí de Huatulco, porque es más fácil y cómodo criticar en el Facebook que ir a ese lugar donde puedes recibir un pedrada o un garrotazo. La gente de Lachilló está acostumbrada a los bloqueos, sus líderes como de otras organizaciones viven del chantaje y la presión para obtener dinero, saben que exponen a gente inocente en caso de salir heridos graves o muertos, no les preocupa, porque de victimarios se convierten en víctimas.
En la oficina de Recaudación de Rentas otro grupo de Lachilló había tomado esas instalaciones, los integrantes de la CODEHU les insistía que dejaran libre la carretera y que se trasladaran a ese lugar pero no cedían. En eso estaban cuando por ahí llegaba un bote de gasolina y unas botellas, al parecer para hacer bombas molotov, camiones que traían palos, todo indicaba que la cosa se iba poner peliaguda, traían hasta extinguidores. Pero faltaba según se comentaba gas lacrimógeno, más palos y escudos para cubrirse de las piedras.
Darío Pacheco en dos ocasiones llegó al lugar del bloqueo buscando por todas formas que por la vía del diálogo se solucionara este problema. Después se supo que recibieron apoyo del municipio de Huatulco y por ello levantaron el bloqueo, pero de pronto una camioneta Nissan no aparecía señalaban que se lo habían quitado a la fuerza a los de Lachilló, mas tarde apareció con el parabrisas roto, los de Lachilló se fueron, se marcharon amenazando con volver.
En Huatulco hay 35 mil habitantes, pero por la defensa del municipio solo estuvieron unas 200 personas que realmente quieren a Huatulco; criticaban en las redes sociales que habían personas del ayuntamiento, si así fuera se entiende porque están preocupados por Huatulco, porque el turismo es el motor de la economía de este desarrollo y de seguir tolerando los bloqueos el retroceso será evidente, no habrá progreso, nadie querrá venir a un destino turístico donde no hay paz ni tranquilidad.
La CODEHU accionó y accionó bien, de que hay riesgos hay riesgos, pueden haber heridos incluso muertos, pero no hay otra alternativa, cuando los encargados de salvaguardar la integridad física y el patrimonio de Huatulco en la Secretaría General de Gobierno se hacen de la vista gorda. No intervienen, no cumplen con su responsabilidad… por eso el pueblo tiene la última palabra.
